Los bares de tapas no faltan en Madrid, pero la “Taberna La Dolores” con su casticismo y buen hacer es uno de los imprescindibles.
Situado en la zona de Huertas, en la Plaza de Jesús, 4, desprende ese estilo clásico de las tabernas de principios del siglo XX.
Fundada en 1.908 como `Casa de Comidas´, ha pasado por varios dueños que han sabido conservar lo mejor del local.
La fachada, con azulejos pintados donde se puede leer en grandes letras: CERVEZAS FRESCAS Y TAPAS, ya invita a traspasar el umbral.
La cerveza, muy bien tirada, y las tapas que ofrecen hacen que queramos repetir varias veces. No tienen cocina para platos calientes, ni falta que les hace. Con sus embutidos, quesos y salazones tienen de sobra. Y todo de muy buena calidad.
El local no es muy grande y todos los días está lleno a rebosar. Esto es un poco incómodo por la falta de sitio pero, evitando las `horas punta´ (de 13 a 15 h.) o los fines de semana, el personal te atenderá maravillosamente bien.
Los boquerones en vinagre, presentados con aceitunas, piparras y patatas fritas, son de los mejores de Madrid. O los pinchos de ventresca o salmón ahumado. Y no digamos nada de las anchoas, riquísimas.
En la “Taberna La Dolores” tomarás el aperitivo mas castizo.